El 2 de agosto de 2013 se desarrolló el noveno Mercado alternativo en Fundación REDES, donde participan hombres y mujeres agricultoras, artesanas y artesanos que llevan sus productos a un espacio que les permite establecer relaciones de comercio justo entre la oferta comunitaria y la demanda de un sector de la capital.
Para la evaluación de la iniciativa, Fundación REDES aportó a las y los integrantes del mercado una sistematización de datos para analizar las variaciones en las ventas en cada uno de los meses, desde noviembre de 2012 a julio 2013. Es así que se registra un promedio de ventas desde 392.75 hasta 867.65 dólares.
La cantidad de participantes ha variado de entre 15 a 27, de los cuales el 74.5% han sido mujeres y 25.5% han sido hombres.
Los territorios que participan en el mercado son:
Cuscatlán: Monte San Juán, Suchitoto, San José Guayabal, Oratorio de Concepción y San Bartolomé Perulapía.
San Vicente: San Lorenzo y San Sebastián.
Las y los productores analizaron el carácter del Mercado Alternativo. “El mercado de nosotros es alternativo porque los productos son más frescos y más baratos” asegura Felícita Erlinda Ávila, quien se moviliza desde Comunidad El Copinol, Suchitoto para comercializar tamales de gallina india.
Sin “regalar” su trabajo, los precios de los productos pueden reducirse significativamente en el Mercado Alternativo, debido a que no existe intermediarios o “coyotes” entre las/los productores y las/los consumidores; éstos suelen comprarles muy barato para revender. Entre más manos hilvanan la cadena de comercialización desde la producción, los productos tienden incrementar su precio, dejando en clara desventaja al productor o productora que debió vender a un precio por debajo del trabajo y de los insumos invertidos para la producción.
Guadalupe Melgar elabora dulces artesanales, se moviliza desde Comunidad Las Lomas, San Bartolomé Perulapía. Guadalupe ha acumulado mucha experiencia y conocimiento en torno a prácticas de economía solidaria, como una opción para superar la exclusión que supone la economía dominante, específicamente, el sistema financiero dominante; de manera que Guadalupe Melgar junto a otras mujeres de su comunidad, se unieron en el “Grupo Solidario Las Guanacas”, un espacio para ahorrar y solicitar créditos con fines de emprendimiento.
“La diferencia entre nosotros y los productos de los súperes, es que en los súperes son los intermediarios los que se quedan con la mayor parte de las utilidades. Nuestro producto va directo al consumidor, y eso nos beneficia a los dos, porque nosotros ganamos lo justo y la gente tienen sus productos frescos y de calidad”, asegura Guadalupe Melgar, cuando reflexiona en trono a las ventajas de los mercados alternativos.
Durante la evaluación las productoras y los productores valoraban algunas oportunidades para el fortalecimiento del mercado alternativo, como buscar otros lugares para comercializar en San Salvador, implementar promocionales para la identificación de las y los participantes, mantener y mejorar las normas de calidad en el mercado, entre otros.
Durante la evaluación, también se hizo referencia a la importancia de utilizar bolsas de papel y no de plástico, de ofrecer alimentos como los atoles en recipientes de morro, y no en vasos desechables contaminantes; de acuerdo a las productoras y productores, es necesario mantener la coherencia entre el pensamiento y la práctica ambientalista.